Pues sí, me tocó el cupón de la ONCE y, bueno, antes de irme a Tahití, huyendo de Montoro en mi nuevo yate, el Christina 2, quería darme un capricho de nuevo rico.
Así que alquilé una de esas avionetas que escriben mensajes en el cielo, una de la empresa “Monegros SkyTypers”, radicada en el polígono industrial de Ontiñena. Por un precio bastante asequible, pude despedirme de mis paisanos con esta espectacular felicitación que hago extensiva a todos aquellos que no se atraganten con las uvas, no entren en coma etílico con el champán y, en resumen, sobrevivan a esta vertiginosa noche.
Si puedes creer a tus ojos, cuando tú te tomes las uvas, en la playa frente a la que estaré fondeado, allá en la Polinesia, será la una del mediodía del 31 de diciembre, hará un sol de ensueño y al 2016 aún le quedarán once horas para disfrutar.
Feliz 2017, os dejo, que estoy viendo cómo la joven Pahura comienza a desprenderse del pareo.
Así que alquilé una de esas avionetas que escriben mensajes en el cielo, una de la empresa “Monegros SkyTypers”, radicada en el polígono industrial de Ontiñena. Por un precio bastante asequible, pude despedirme de mis paisanos con esta espectacular felicitación que hago extensiva a todos aquellos que no se atraganten con las uvas, no entren en coma etílico con el champán y, en resumen, sobrevivan a esta vertiginosa noche.
Si puedes creer a tus ojos, cuando tú te tomes las uvas, en la playa frente a la que estaré fondeado, allá en la Polinesia, será la una del mediodía del 31 de diciembre, hará un sol de ensueño y al 2016 aún le quedarán once horas para disfrutar.
Feliz 2017, os dejo, que estoy viendo cómo la joven Pahura comienza a desprenderse del pareo.