Ya es primavera en El Corte Aragonés,
parafraseando el eslogan. El famoso equinoccio ha ocurrido ya. Lo dijeron los
astrónomos, lo ha confirmado la mismísima televisión en sus programas del
tiempo, que son como unas misas laicas, en las que el oficiante reparte
chubascos, nieblas matutinas y heladas en lugar de hostias (consagradas).
Agazapados en espera de una
manifestación, afilando la correspondiente camiseta, los ciudadanos descontentos,
que abominan del actual régimen político, acunan el sueño multicultural de una primavera árabe por estos lares, que
acabe, en nombre de la alianza de las civilizaciones, con Rajoy y con Montoro,
como se acabó con Don Rodrigo y toda la caspa visigoda. El gobierno islamista
subsiguiente, se encargaría, en aplicación de la sharía, de cortar las manos de
Bárcenas y Ana Mato, luego si les apetecía podrían, mediante unos EREs bien
urdidos y convenientemente ceremoniados, nombrar califas a todos sus cuñados,
yernos, primos y demás allegados, lo que haga falta.
Y si no hay primavera árabe por estos pagos,
pues “Primavera Negra” de Henry Miller, que hay que ver lo que son Henry Miller
y Faulkner en este pueblo, o “La Primavera” de Vivaldi, o “Primavera con una
esquina rota” de Mario Benedetti o “Sonata de Primavera” de Valle-Inclán, o
“Risveglio di primavera” de Franco Battiato, cualquier cosa con tal de que
suene a primavera, huela a primavera, o evoque la primavera. Aunque mi
primavera favorita y feliz fue la que cantaban Los Pasos en 1968:
“Llegó la primavera a la ciudad,
todo ha cambiado de color...
como hace más calor
las chicas ya se quitan ropa y hay que
ver
como la gente canta, corre y ríe
más que en el invierno que pasó...
Los pajaros que no se oian ya,
hoy cobran nueva vida y cantan.
En el parque que antes era triste y gris,
hoy todo es verde y hace sol;
y alguna que otra pareja se esconde
y se dedican a cantar así:
la lá lará lará lará lará
la
la la lá, la la la lá…”
Sublime. Nueve siglos de lírica resumidos
en esta canción. Ya no me acordaba, casi. Un subidón de puro gozo antes del
pozo.
Hasta a mi pueblo, donde todo llega con
retraso y en mal estado, cuando ya en la metrópoli zaragozana no lo quieren, o
se ha pasado de moda, puntual la primavera ha venido y Don Antonio Machado no
sabe cómo ha sido. En este momento me atrevería a parafrasearlo así: la primavera ha venido / yo no sé cómo se ha atrevido".
He
salido a pasear como acostumbro por el campo y todo está de un verde brillante,
lavado por las últimas lluvias y plagado de una humilde flor muy común aquí,
una especie de mala hierba que, si no me he informado mal, es una crucífera y
se llama rabaniza blanca.
Yo
la encuentro bonita y agradable y quiero romper una lanza por ella, porque es
la única flor silvestre de aquí que se toma la molestia de florecer en
invierno. Cuando más falta nos hace.
Aquí la rabaniza blanca haciendo amistad con un cuco |
Todo el campo tapizado de blanco |
Y a mí que la canción esa me recuerda a 'Maxwell's silver hammer' de los Beatles. :-)
ResponderEliminarColdplay no sólo le hizo pupita a Joe Satriani...